La firma biométrica es un tipo de firma digitalizada que equipara los documentos digitales a los de papel, en cuanto a validez legal. Esta tecnología sirve para identificar al firmante utilizando unos parámetros muy estrictos, de manera que solo pueda ser utilizada por la persona a la que identifica.
¿En qué se basa la autenticidad de firma biométrica?
Esta modalidad emula la firma manuscrita en el papel y otorga al documento en cuestión la misma validez legal, con la diferencia de que no hace falta presencialidad. Los parámetros en los que se basa esta tecnología para identificar a una persona y ofrecer autenticidad de firma son los siguientes:
- La presión del bolígrafo digital o el lápiz en el dispositivo.
- La velocidad de la escritura y el tiempo que tarda en firmar.
- Características y alteraciones personales de la firma.
- Es importante no confundir esta firma legal con la digitalización de la manuscrita, ya que esta última no tiene ninguna validez legal y no sirve para representar al firmante.
Ventajas de la firma digitalizada y biométrica
Tener una firma digital biométrica reporta multitud de ventajas, tanto a nivel profesional como personal, sobre todo en ciertos sectores profesionales. Estas son sus principales ventajas:
- Además de validez legal en todo tipo de operaciones, tiene una seguridad tecnológica muy avanzada.
- Ahorra tiempo en desplazamientos, ya que se puede firmar a distancia mediante el uso de un software en cualquier ordenador.
- Es imposible de falsificar. Su uso puede quedar registrado, y es posible verificar los documentos firmados en caso de que se olvide.
- También permite una aplicación en tiempo real.
- Agiliza trámites de gestión documental, ya que permite su automatización.
- En ciertas profesiones, ofrece comodidad y prestigio.
- Es muy sencilla de utilizar.
- Ahorro en papel, espacio y dinero. Además, es un procedimiento mucho más sostenible.
Aplicaciones de la firma biométrica
La firma digital biométrica está al alcance de cualquier persona que quiera ahorrar tiempo y dotar de seguridad digital a sus documentos. Aquellos que, por su trabajo, necesiten poner su firma en más ocasiones, serán los principales beneficiarios. De forma general, estas son las principales aplicaciones de esta tecnología:
- Procesos de facturación. Los departamentos de facturación de las empresas pueden ahorrar mucho tiempo con esto. De otra manera tienen que imprimir el documento en cuestión, firmarlo y escanearlo para enviar al destinatario.
- Firma de contratos de forma masiva. Un ejemplo de ello son los negocios de renting, las notarías, los despachos de abogados, etc., que tienen que firmar multitud de documentos al día. Al tener plena validez legal, esta firma ahorra mucho trabajo.
- En cualquier comercio, al pagar con una tarjeta. De esta manera evitamos que se hagan compras fraudulentas si se produce un robo.
- Cuando entregan un paquete. La firma digitalizada y biométrica indica que se ha recibido sin ninguna duda.
- En las operaciones bancarias, sin necesidad de tener que coger cita en el banco, desplazarse y perder tiempo en ello.
Implementación sencilla y eficaz
Las soluciones de firma digitalizada biométrica que existen en el mercado son muy sencillas de utilizar. Solo al principio se tendrá que dejar constancia de ciertos datos y parámetros, como la firma manuscrita y otras variables. Luego, esa información queda encriptada. Se trata de un método de alta seguridad que garantiza que no se puede manipular.
En definitiva, la firma biométrica es una firma digital con validez legal y múltiples operaciones. Entre sus principales beneficios destacan el ahorro de tiempo, ya que no se necesita desplazamiento físico para firmar documentos importantes, y la seguridad que aporta gracias a su encriptación. Se trata de una tecnología muy avanzada, que cada vez se está utilizando en más sectores profesionales, y que está plenamente avalada por la Administración.